Presión de Compañeros

“Vamos. Todos lo están haciendo”. Entonces, ¿tú por qué no?

Es casi un hecho experimentar frecuentemente la presión del grupo o compañeros durante su adolescencia.

Supongamos que te invitan a una fiesta en la que sabes habrá alcohol o drogas. Un amigo te incita a saltar la clase. Alguien te ofrece un cigarrillo. O amigos hablan sobre tener sexo con sus novios o novias. ¿Cómo respondes? ¿Estás tentado de seguir sus ejemplos? ¿O puedes permanecer fuerte en tu propio criterio?

En algún momento, todos tienen el deseo de encajar en un grupo. Si te interesan los deportes, puedes pasar el rato con los “deportistas”. Si te interesa la música, pasas tiempo con otras personas que disfrutan de la música. Perteneces a ese grupo y te sientes seguro cuando formas parte de él. El grupo identifica quién eres y lo que estás haciendo.

Pero, ¿qué ocurre si las personas de “tu grupo” comienzan a hacer cosas que son incorrectas, dañinas o incluso ilegales? ¿Y si estas mismas personas son tus amigos?

Esto es lo que llamamos presión de grupo: la presión para ajustarse a los comportamientos, actitudes y hábitos personales del “grupo”. En muchos casos existen serios riesgos, tu decisión sobre cómo manejar la presión de grupo puede tener grandes consecuencias

Desafortunadamente, la mayoría de los adolescentes no son aplaudidos por su procesamiento de pensamientos lógicos. La mayoría se siente invencible, como si “nada malo puede pasarme a mí”. Pero necesitas evaluar los riesgos con bastante anticipación. Considera estas preguntas antes de sentir la tentación de seguir a la multitud:

• ¿Podría esto lastimarme físicamente?
• ¿Podría esto lastimar a alguien más?
• ¿Esto es contra la ley?
• ¿Podría ir a la cárcel?
• Atentando contra mi salud, ¿Cuáles son los efectos a largo plazo? ¿Mi educación? ¿Mis relaciones familiares?

Ahora, viéndolo de otro punto de vista, también pudieras usar la presión de grupo para tu ventaja. Piensa en ello como presión de grupo “competitiva”.

Por ejemplo, si eres activo en deportes, tus compañeros de equipo probablemente te presionen para que seas lo mejor que puedas ser. Si estás en el equipo de atletismo, debes seguir el ritmo del corredor más rápido, porque sabes que te hará mejor. Si intentas obtener buenas calificaciones, compara tus grados con los que se encuentran en la parte superior de la lista. Si estás en la banda musical y hay músicos mejores que tú, te presionan para que te esfuerces por ser el mejor músico que tú puedas ser.

La decisión es tuya

En algún momento, cada persona debe permanecer sola, incluso cuando es tentada por amigos y otros compañeros. Tú sabes lo que es correcto, sabes lo que está mal, y solo tú puedes decidir qué camino tomar.

Pregúntale a casi cualquier persona que haya “estado allí, hecho eso” sobre la presión de grupo. La mayoría de la gente se ha ido con la multitud en algún momento de su vida adolescente, y han tenido que vivir con las consecuencias. Es probable que escuches que inclinarse ante la presión de los compañeros no valió la pena.

Ahora es tu oportunidad de creer en ti mismo y si es necesario, de estar solo algunas veces. Cuando te enfrentes a las presiones de grupo, evalúa los riesgos con anticipación. Si no te sientes cómodo haciendo algo, no dudes en rechazar la invitación con un “no, gracias”.

Aprender a defenderte a ti mismo y tus creencias y a anticipar las consecuencias de tus acciones son pasos importantes para convertirte en un adulto responsable.

Fuente: WebMD, Teens and Peer Pressure